¡No puedo!

¿Cuántas veces hemos dicho ¡NO PUEDO! cuando somos desafiados a hacer algo nuevo o aparentemente difícil? “No puedo nadar”, “no puedo andar en bicicleta”, “no puedo con las matemáticas”, “no puedo con este idioma”, “no puedo con la tarea” , “no puedo sacar esta canción“, “no puedo concentrarme”, “no puedo hacer dos cosas a la vez”, “no puedo olvidar”, “no puedo aguantar a esta persona un segundo más”, “no puedo perdonar”, son algunos de los “no puedo” que he escuchado a lo largo de mi vida.

Hoy no fue la excepción y algunos de los niños del Orfanato dijeron ¡No puedo! en la primera clase de dibujo que tuvimos hace pocas horas atrás. El ejercicio fue muy sencillo: dibujar diferentes gestos y poderlos diferenciar. Caritas que expresaran felicidad, tristeza, ira, aburrimiento, seriedad, sueño, etc., fue lo que dibujaron.

Antes de dibujar cada cara, teníamos que hacer el gesto nosotros mismos, para darnos cuenta con detalle cómo era exactamente, lo cual les causó mucha gracia. Luego yo explicaba cómo hacer cada trazo, dibujándolos en una pizarra para que se pudieran guiar. Poco a poco sus hojas se iban llenando de líneas.

Algunos lograron hacer sus dibujos fácilmente y se divirtieron muchísimo. Otros, en cambio, se paralizaron frente a su hoja en blanco, frustrados, al no saber por dónde comenzar ni qué hacer. Aquellos me pedían inocentemente que yo les hiciera el ejercicio. Les tuve que explicar que el objetivo de la clase era que ellos mismos hicieran sus dibujos sin ayuda. Casi todos entendieron, menos uno.

Isaías tenía mucho miedo de equivocarse y hacerlo mal; pero más allá de eso, le aterrorizaba la idea de que los otros niños pudieran burlarse de sus dibujos. Hice algunos intentos para lograr convencerlo de que dibujara. “Tú puedes hacerlo”, “Inténtalo”, “si no lo intentas no vas a saber si puedes o no”, “nadie se burlará de ti”, fueron algunas de las cosas que le dije. Pero, nada de eso, cambió su actitud. Sólo se limitó a repetir una y otra vez “No puedo” y a torturarse viendo a los otros niños cómo si podían hacerlo.

Yo por mi lado, tenía que continuar con la clase y no podía hacer más por Isaías en esos momentos. Una hora pasó, y no fue sino hasta el final de la clase, cuando todos terminaron de dibujar y cada uno tomó su camino, que pude hablar más holgadamente con él.

Tomé su hoja en blanco y realicé el primer trazo: un ovalo, y le dije: “A ver Isaías, haz lo mismo que yo hago al lado. ¡Vamos! no es tan complicado. Si yo pude, tú puedes.” No demoró mucho, aunque con un poco de temor, tomó el lápiz y dibujó un pequeño ovalo y dijo luego: “Está muy pequeño”. Enseguida respondí: “Eres un excelente observador y eso es muy bueno si quieres dibujar… Es cierto, el ovalo que hiciste está un poco pequeño, pero no pasa nada.” Le di un borrador y añadí: “esto sirve para borrar cuando nos equivocamos”. Lo tomó y borró su primer intento. Y seguí diciéndole: “Así pasa cuando estamos aprendiendo, nos equivocamos; pero debemos intentarlo de nuevo. Ahora haz el mismo ovalo, más grande. ¡Vamos! inténtalo de nuevo”. Cogió nuevamente el lápiz y con menos temor, lo hizo muy bien, bastante similar al que había hecho yo primero.

Poco a poco fuimos dibujando la carita. Yo un trazo, luego él el mismo trazo y así hasta terminar. Al final le dije: “Ya ves que puedes, te salió súper chévere, hasta más bonito que el mío”. Isaías sonrió y me dijo: “¿eso es todo? ¡Hagamos otra carita!”.

Hoy Isaías me recordó una vez más, cuánto los seres humanos le tememos a los errores. Nos paralizamos y no tomamos riesgos. Pensamos que es imposible realizar tal o cual actividad. Pero también me enseñó, que con un poquito de valor podemos lograr hacer aquello que parece imposible realizar.

Me gustó mucho la definición de valor que leí en una ocasión, y con esto termino mi nota: "VALOR NO ES IGUAL A NO TENER TEMOR, VALOR SIGNIFICA SEGUIR ADELANTE A PESAR DEL TEMOR” Es posible realizar TODO cuando existe amor de por medio. Ahora Isaías no le asusta dibujar, AMA dibujar. EL AMOR ECHA FUERA TODO TEMOR. Por amor puedes lograr lo que te propongas. ¡Piénsalo!

Izquierda: Dibujo de Isaías. Derecha: Dibujo de Daniela (el de Isaías me gusta más) :)

Comentarios

Entradas populares