Penicilina hilarante
jajaja... es que me acuerdo y me mato de risa de nuevo.
- Niña, ¿es la primera vez que se inyecta penicilina?
- No, jajajajaja
- ¿Cuándo fue la última vez que se puso?
- No me acuerdo, era muy pequeña, jajaja
- ¿Y por qué se ríe tanto? ¿No le duele?
- jajaja, creo que su penicilina es hilarante, jajaja - fue lo único que se ocurrió decir -
Y si que dolió esa movida. No podía ni caminar luego. Lo que me advirtió la enfermera de que iba a estar patoja un buen rato fue verdad... Mientras caminaba a cancelar la cuenta me dolía tanto pero me parecía tan graciosa mi tragedia, no me podía parar de reír. La verdad es que mi risa no fue a causa de la penicilina que era hilarante. Tengo que reconocer que estaba algo nerviosa. Me di cuenta también, una vez más, que me suelo reír mucho en situaciones difíciles, dolorosas o tristes. Por favor, jamás me pidan decirle alguna mala noticia a alguien, no soy nada buena para hacerlo.
Confieso que hice todo, todo lo posible por evitar inyectarme, pero hoy ya no pude más. Después de una noche más de tanta tosedera sin poder dormir bien y al ver que realmente no estoy mejorando con pastillas, decidí ir a que me inyecten. El plan de irme a Machachi para mi cumple al final se hizo agua, no me animé ir enferma a reverendo frío. Así que pasaré en Quito todo el día. Gracias a Dios está haciendo solcito, así que iré con Susy a comer y caminar por el Elejido Park jaja. Para más tarde no tengo planes, de seguro algo inventaré.
Tenía muchas ganas de ir a un lugar apartado este día, a una montaña en realidad y pasar tiempo a sólas con Dios, pero mi salud por ahora no me ayuda mucho. Espero que encuentre hoy aunque sea un cerrito donde no haya tanto frío para hacerlo jeje. Pero bueno, Dios sabe como hace las cosas, como dice mi gente. Si no es posible hoy, en otro momento lo haré (queda pendiente).
Sólo quería escribir un poquito antes de salir a parisear, el poder expresar mi gran amor hacia Dios. Reconocer cuánto Él me ha amado a lo largo de mis 30 años de vida. Confesar que mi vida no ha sido color de rosa y perfecta como muchos pueden pensar, que he tenido dificultades y muchas luchas, pero en medio de todo y sobre todo, Dios ha sido una constante en mi vida, ha estado acompañándome siempre, inclusive en momentos de duda, desobediencia y necedad. Él ha sido el autor de cada victoria, ¡Él ha sido! Por otro lado, Dios ha llevado mi vida a lugares muy hermosos y me ha permitido vivir grandiosas experiencias. Y lo sigue haciendo, sigue tomando mi mano, como un padre hace con su hijo al enseñarle a escribir. Es así como Él me ayuda a escribir mi historia, la que sale de su mente, una perfecta historia.
Mi deseo es caminar contigo hasta el final de mis días en esta tierra hermosa que has creado para mi. Y vernos nuevamente en la Eternidad. Mi amor es sincero y sin pretensiones y nadie puede negar lo que yo he vivido a tu lado. ¡Te amo Dios! Estoy muy feliz de cumplir un año más en tu presencia.
- Niña, ¿es la primera vez que se inyecta penicilina?
- No, jajajajaja
- ¿Cuándo fue la última vez que se puso?
- No me acuerdo, era muy pequeña, jajaja
- ¿Y por qué se ríe tanto? ¿No le duele?
- jajaja, creo que su penicilina es hilarante, jajaja - fue lo único que se ocurrió decir -
Y si que dolió esa movida. No podía ni caminar luego. Lo que me advirtió la enfermera de que iba a estar patoja un buen rato fue verdad... Mientras caminaba a cancelar la cuenta me dolía tanto pero me parecía tan graciosa mi tragedia, no me podía parar de reír. La verdad es que mi risa no fue a causa de la penicilina que era hilarante. Tengo que reconocer que estaba algo nerviosa. Me di cuenta también, una vez más, que me suelo reír mucho en situaciones difíciles, dolorosas o tristes. Por favor, jamás me pidan decirle alguna mala noticia a alguien, no soy nada buena para hacerlo.
Confieso que hice todo, todo lo posible por evitar inyectarme, pero hoy ya no pude más. Después de una noche más de tanta tosedera sin poder dormir bien y al ver que realmente no estoy mejorando con pastillas, decidí ir a que me inyecten. El plan de irme a Machachi para mi cumple al final se hizo agua, no me animé ir enferma a reverendo frío. Así que pasaré en Quito todo el día. Gracias a Dios está haciendo solcito, así que iré con Susy a comer y caminar por el Elejido Park jaja. Para más tarde no tengo planes, de seguro algo inventaré.
Tenía muchas ganas de ir a un lugar apartado este día, a una montaña en realidad y pasar tiempo a sólas con Dios, pero mi salud por ahora no me ayuda mucho. Espero que encuentre hoy aunque sea un cerrito donde no haya tanto frío para hacerlo jeje. Pero bueno, Dios sabe como hace las cosas, como dice mi gente. Si no es posible hoy, en otro momento lo haré (queda pendiente).
Sólo quería escribir un poquito antes de salir a parisear, el poder expresar mi gran amor hacia Dios. Reconocer cuánto Él me ha amado a lo largo de mis 30 años de vida. Confesar que mi vida no ha sido color de rosa y perfecta como muchos pueden pensar, que he tenido dificultades y muchas luchas, pero en medio de todo y sobre todo, Dios ha sido una constante en mi vida, ha estado acompañándome siempre, inclusive en momentos de duda, desobediencia y necedad. Él ha sido el autor de cada victoria, ¡Él ha sido! Por otro lado, Dios ha llevado mi vida a lugares muy hermosos y me ha permitido vivir grandiosas experiencias. Y lo sigue haciendo, sigue tomando mi mano, como un padre hace con su hijo al enseñarle a escribir. Es así como Él me ayuda a escribir mi historia, la que sale de su mente, una perfecta historia.
Mi deseo es caminar contigo hasta el final de mis días en esta tierra hermosa que has creado para mi. Y vernos nuevamente en la Eternidad. Mi amor es sincero y sin pretensiones y nadie puede negar lo que yo he vivido a tu lado. ¡Te amo Dios! Estoy muy feliz de cumplir un año más en tu presencia.
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